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El abuso sexual infantil: un mal en ascenso en Venezuela

Celia Maxwell *
Fundación Reviresco


No al abuso silencioso

La lucha contra el abuso sexual infantil resulta ser uno de los más difíciles por ser un tema que aún sigue siendo un Tabú en nuestra sociedad latinoamericana. Se prefiere obviar no hablar del tema. Se sorprenderían que algunos fiscales evitan confrontar información sobre este mal que se expande e incrementa día a día.

Según la UNICEF ONU: Una de cada diez niñas en el mundo sufre de abuso sexual. Al menos 120 millones de niñas menores de 20 años en todo el mundo (alrededor de 1 cada 10) han experimentado relaciones sexuales por la fuerza u otros actos sexuales forzados en 2012, según un informe de la Agencia de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).

120 millones de niñas traumados con problemas que pudieran evolucionar en prostitución, delincuencia, disfuncionalidad emocional que van desde la bipolaridad, doble personalidad y un sinnúmero de problemas psico-emocionales.

Se estima también que más de 73 millones de varones son abusados igualmente. Las víctimas en su mayoría no denuncian a su atacador 1) por temor; 2) porque sienten vergüenza y se creen culpables del hecho; 3) porque son amenazados de muerte o coaccionados. Los padres no denuncian también porque consideran el hecho una vergüenza familiar.

Hoy encontramos en la región Andina situaciones de poder político o armado que utilizan la intimidación a las familias para cometer atrocidades contra los niños, niñas y adolescentes, como a mujeres y por supuesto no hay denuncia alguna que sientan estas personas que puedan hacer ante ninguna autoridad por del agresor, por temor a represalias, hasta la pérdida de sus vidas. Está situación que era fronteriza ha penetrado a Venezuela en donde grupos hostiles tienen dominio en ciertos estados y piden que se les entregue los niños para ser abusados.

Lo triste de todo este panorama sea un abuso por un depredador individual o colectivo, son las secuelas que dejan estos tipos de abusos que tienen un impacto devastador hasta la adultez y con frecuencia la víctima se convierte en agresor, lo cual se convierte en una cadena de generación en generación familiar. El abuso puede repercutir en algunos males mencionados anteriormente en este artículo, como también en violencia intrafamiliar, embarazos a temprana edad, delincuencia y manifestaciones de criminalidad serial o problemas psicológicos como bipolaridad por ejemplo. En mayor grado puede ser conducente a tendencias suicidas.

La carga emocional para un niño, niña o adolescente que por temor, vergüenza, sentimientos de culpa de algo que él, ella no son responsables es llevado a través de la vida en un gran silencio, sin la ayuda psicológica necesaria para manejar el dolor y poder asumir una vida lo más sana posible, a nivel mental, emocional y sexual.

Por lo general la familia no se entera de lo que pasa y luego no entiende porque sus hijos viven alejados de ellos ó porqué una relación familiar muy hermosa en la niñez o en la adolescencia, se convirtió en una elación fría y distante, o ese niño, niña o adolescente feliz, se volvió sombrío, poco comunicativo y quizás mal educado.

La Fundación Reviresco se crea como una organización sin fines de lucro con la finalidad de contribuir a disminuir esta disfuncionalidad social que afecta el futuro de muchos niños y niñas, y el futuro de nuestras sociedades ya plagada de delincuencia. Nuestra meta es sacarlo a la luz que se hablé, se debate públicamente, que se ataque de forma masiva y abiertamente. Que los niños, niñas y adolescentes tengan una voz que no se quede en el silencio y que además se le da la asistencia emocional que requieren para sanar.

Para el logro de nuestra meta de masificar nos proponemos trabajar con los Consejos Comunales que tienen acceso directo a las familias en las comunidades y con las instituciones que hacen vida en su entorno. Formar Promotores que sean vigilantes, ante todo que sensibilicen en la detección del abuso a padres, representantes y a educadores.

Además, estimulen a estos a denunciar los casos no solo de abuso sexual infantil, sino todo tipo de abusos que puedan sufrir los pequeños. Se espera con los primeros cien promotores generar 2500 más a nivel nacional en los Consejos Comunales, organizaciones parroquiales y algunos colegios.

En octubre de este año se espera iniciar la capacitación de los primeros 30 promotores con apoyo del movimiento sindical organizado del Estado Monagas y la probable participación de Gestión Social del Ministerio público, con que nos hemos reunido en mesas de trabajo, aunque sobre otras materias vinculantes.

La Fundación Reviresco aborda también el tema del maltrato de los adultos mayores que al igual que los niños, niñas y adolescentes están incluidos en nuestra campaña de “NO AL ABUSO SILENCIOSO”, estos también sufren en silencio maltratos físicos, negligencia y abandono, inclusive malos tratos por las instituciones que deben brindarle servicio y ellos se callan. La Fundación ha asistido a adultos mayores con medidas de desalojo para asegurarles un trato digno, en la restitución a sus hogares y asegurar si hay menores de edad sean atendidos apropiadamente; esto se ha hecho conjuntamente con el Movimiento de Inquilinos. Hemos asistido a mujeres que sufren de violencia con el apoyo del Ministerio Público.

En Venezuela se registra el aumento de más de un 40% de abusos y violencia contra niños indefensos, solo en 2014. El 83% de los casos de las violaciones son contra las niñas y un 16 % son varones.

Escríbenos a: fundación@reviresco.org. Se una voz para el abusado silente que no denuncia y sufre en silencio.

Nuestro profundo agradecimiento a LatiCe.

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*Celia Maxwell es Directora de la Fundación Reviresco

Publicado: noviembre 2014

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