13 de noviembre 2011
La dicotomía hombre-mujer y la hegemonía heterosexual de la sociedad conducen a que en muchos lugares del mundo, y pese a que existe una legislación favorecedora de sus derechos humanos, los miembros de la comunidad LGBT no sólo no sean aceptados por la sociedad sino que, además, se ven obligados a vivir en un medio hostil en donde predominan el prejuicio, los estereotipos negativos y la discriminación.