Almuerzo del Reencuentro por Compañía Rosado Tobatí

A veces parece imposible alcanzar metas, a pesar de que los años nos pasan factura tenemos, y debemos, seguir soñando.  Nos hacemos la idea, luego la llevamos a la práctica y zás allí esta Zuly, avisa que no llegara por razones personales, pero que colabora, está llegando Laura, con su alegría contagiosa, está Jorge, está Ryan que se suma decididamente a organizar la parrilla, está Sebastián y casi toda su familia. Y también llegó la primera paraguaya, la Sra. María, que se transforma en una embajadora guaraní con una sopa paraguaya para compartir, al fin la conocimos. Está Heber, Victoria, Hugo, Elizabeth, (en toda la previa) Jonatan mi vecino que dice que no va a llover y se dispone a ayudarnos prestando sillas y una mesa, todos aportando algo. Atravesamos la ciudad de Estocolmo de norte a sur en el auto de Hugo bajo una amenaza climatológica, nerviosos, discutidores, esperanzados y se desborda el Rancho e Goma. Está Tomás, con su tierna amplia sonrisa, dispuesto a empaparse y dar una mano por Paraguay. Está Rebeca, otra entrañable, con su fuerza y juventud. Está Erik, el novio de Daniela, que no entiende un pito de nuestra conversa. Juan colabora también. Desde lejos por diversas razones, pero siempre presentes, Claudia, Algren, Linda, Emma, Omar, Ana, Alfredo, Verónica, Dani, Mauro, presentes Omar, Jorge, Stella, Julio de Lund, Susana, Daniela, Svante y María Elena. Ellas /ellos son las/ los verdaderos artífices, de haber logrado aquella tarde 4.060 coronas para Paraguay. Pero hay más. El fortalecimiento de la red solidaria de LatiCe, la amistad el afecto, la alegría, la solidaridad con la comunidad afrodescendiente de Rosado Tobati, con palabras de solidaridad, convirtiéndose en realidad a sabiendas de que ya hemos ingresado en la comunidad 100 dólares que han servido para comprar herramientas indispensables, para enviarnos todos los recibos que acreditan la compra. Y hay más. Nos dice Cristian Núñez. ”Uds. están pendientes de nosotros y eso nos da fuerza, vamos a levantar un horno de barro Tatakuá (fuego sagrado) como contraparte a vuestra ayuda.” Ya plantaron, ya hablaron con la directora, padres, madres y alumnos de la Escuela Santa María, para beneficiar a la población infantil en alimentos y conocimientos. Ya algún gurí se quiere escapar del aula para la huerta. Tal vez sea la hora, pasito a paso, de construir, tal cual lo hizo el maestro Marcos Arzuaga, un aula verde, donde se enseñe a plantar, a calcular, a multiplicar, donde se aprenda matemática física y química. Esto unido a la identidad cultural de Rosado Tobati, a la potenciación y difusión del proyecto, contemplando la problemática medio ambiental, el agua, la tierra, el bosque, constituirán los desafíos de que otra vida es posible. Y si ellos deciden ayudar a otras comunidades, como la de Emboscada, saben que nosotros los estaremos apoyando. La reunión familiar arrojó otro saldo positivo, nuevas socias y socios para LatiCe, integración de gente joven a los grupos de trabajo y la voluntad de seguir.

También estuvieron presentes en esta actividad a través de saludos la Asociación Hjelpemiddelfonden de Noruega y La Fundación Logros de Baltasar Brun.

La recaudación de la campaña por Rosado /Tobati en donaciones hasta el momento es de 4.050 coronas suecas, entre los que destacamos a Cecilia de Noruega, que inmediatamente nos hizo llegar su colaboración. La recaudación en el almuerzo del reencuentro es de 4.060 coronas suecas, llegando a un total de 8.110 coronas sueca.

A los que todavía quieran colaborar al leer estas líneas lo pueden hacer al swish 123 629 8095 o por medio de un depósito al Plusgiro 519395-8 escribiendo la palabra Paraguay.

¡Gracias a todas y todos por vuestra solidaridad!