En Nicaragua, oficialmente no hay restricciones de movilidad ni cierre de instituciones ni del comercio, tampoco hay suspensión de clases en escuelas y universidades públicas. Sin embargo, reciente el Ministerio de Educación, orientó que cada colegio tenga a la entrada un espacio destinado para lavado de manos. Además fueron aceptados los planes de los colegios que optaron por la educación a distancia y/o semi-presencial.
Recientemente el Gobierno ha orientado el uso de mascarillas y el distanciamiento social, además del constante lavado de manos que fue de las primeras medidas establecidas.
Desde el 18 de marzo que se dio a conocer oficialmente el primer caso de Covid-19 en el país, la Fundación para la Autonomía y Desarrollo de la Costa Caribe, FADCANIC, tomó medidas de prevención en todas las oficinas y centros en la Costa Caribe. A manera general, se ha dividido el trabajo de forma presencial y a distancia reduciendo de esta manera la cantidad de personas en las oficinas y se mantiene el distanciamiento físico, como una de las medidas principales para prevenir el contagio del Covid-19. Se cancelaron actividades masivas con beneficiarios, como cursos, talleres y ferias y también se cancelaron viajes de trabajo. Por otro lado se incrementó la frecuencia de limpieza de superficies y zonas de contacto. Se dispuso alcohol en gel para el personal y puestos de lavado de manos a la entrada de las oficinas. Se restringió la entrada a las oficinas a particulares, a los cuales se atiende desde afuera.
En los proyectos, que realizan cursos y reuniones, se restringe la participación a 10 personas o menos, en espacios donde se pueda garantizar la distancia recomendada. Además se está desarrollando una metodología especial, adaptada a la situación del distanciamiento físico para la implementación de cursos vocacionales que generalmente cuentan con más de 20 estudiantes. Cursos terapias que se brindan a madres con niños y niñas con variación funcional, se están realizando menos días a la semana, separados también por turnos y se reúnen a cuatro madres con sus hijos/hijas por la mañana y otro grupo por la tarde. Las promotoras que hacen visitas casa a casa, las han reducido a una visita al día a una casa, con todas las medidas de seguridad, como tapabocas, lavado de manos y uso de alcohol en gel. Si en una casa el beneficiario o la familia presente cuadro respiratorio, malaria o dengue, se suspende la atención hasta que se recuperen. En otros casos, en visitas a familias en el campo, se evita el saludo de manos y se dejan los zapatos a la entrada de las casas y en las conversaciones se mantiene la distancia.