Favores por votos
Los punteros políticos favorecen a los clientes, a través de un plan de alimentación, de educación, de una beca, pero a medida que pasa el tiempo, el puntero se convierte en "el amigo" que le resolverá los problemas diarios.
(Rosario, Argentina) En tiempo de elecciones, en Argentina significa para muchos: Tiempo de hacer negocios; posibilidad de conseguir una casita, un terrenito para el club, estar documentado.
La crisis social y económica fomentó y fomenta, la presencia y el accionar de lo que se denomina: "Clientelismo", una especie de institución difícil de advertir, donde encontramos actores como "los "punteros políticos", "los clientes", y todos los fenómenos, sentimientos y dinámica que giran alrededor de los mismos.
Algunas de las manifestaciones de lo que les cuento son:
- Llenar las plazas, estadios u otros ámbitos en actos partidarios.
- Comprar las voluntades de las personas.
- Generar saqueos.
- Provocar actos de violencia colectiva.
- Corrupción.
- Misterios resultados en los comicios.
La fórmula podría ser = FAVORES por VOTOS.
El Clientelismo y sus actores, que no sólo se pueden observar en el Gran Buenos Aires, sino a lo largo de todo mi país, produce el control político.
Se dispone de los recursos del Estado para la construcción de un aparato de seguidores, mediante una distribución personalizada de dichos recursos.
Este fenómeno social, se alimenta con: El desempleo y la pobreza, llevando al pueblo a una extrema vulnerabilidad, justamente para que caigan en estas redes que pasan inadvertidas.
Esta encrucijada, este drama es generado desde afuera, cayendo sobre las personas a modo de lazo que va atando las voluntades de quienes luchan entre vivir o morir.
Estos clientes son verdaderas víctimas del Estado y de los mercados, quienes perfeccionan el encanto de manipular, haciendo política con esas necesidades.
Los punteros políticos favorecen a los clientes, a través de un plan de alimentación, de educación, de una beca, pero a medida que pasa el tiempo, el puntero se convierte en "el amigo" que le resolverá los problemas diarios.
Los punteros tienen valiosos contactos personales con funcionarios, que tienen los recursos del Estado.
Estos buenos muchachos (hombres y mujeres) aprietan a los dirigentes, en ocasiones distribuyen drogas, provocan violencia en los partidos de fútbol, provocando heridos, destrozos materiales.
El Cliente que recibió (que cree que recibió el favor) a través de un puntero, llámese un kilo de yerba, un kilo de azúcar, pañales, se siente "empujado" a asistir a los actos que organizan sus amigos punteros. Se trata de una lealtad que con el tiempo, puede resultar en conseguir un puestito en la Municipalidad, en un Distrito, u obtener un subsidio. Pero tal vez tengan que esperar bastante.
Los tiernos mensajes que manejan los punteros son:
Solidaridad
Somos una gran familia
Amor al prójimo
Cooperación
Ayuda a los pobres
Me sacrifico por los niños.
Doble verdad, doble vida, contradicción, mentiras.
Como Argentina, sin querer ser utópica, apelo a la reserva de valores sustanciales, apelo al valor intrínseco que tiene cada persona, apelo a un cambio social y político.
Más artículos de: María Victoria Eraso