La periodista nicaragüense Rosario Montenegro Zeledón opina sobre la ayuda para el desarrollo
Rosario firma libros
Rosario Montenegro es periodista y ha trabajado más de 20 años en diferentes periódicos locales de Nicaragua, entre otros, La Prensa, El Nuevo Diario y La Tribuna. Ha trabajado también en diferentes instituciones privadas y públicas, por ejemplo al lado de Agustín Jarquín cuando éste era auditor nacional. Rosario Montenegro ha publicado un libro sobre las elecciones provinciales en Nicaragua en el 2000, 2001 y 2008 y colaborado con algunos periodistas que dieron seguimiento a las campañas presidenciales de 1996, 2006 y 2008. Rosario ha publicado Hijas de casa, una forma de exclavitud moderna, considerado como uno de los mejores trabajos periodísticos de Nicaragua, y parte del libro Cuando la niñez es noticia. Rosario ha escrito también varios ensayos de historia, cultura y turismo sobre ciudades de Nicaragua, por ejemplo el ensayo sobre San Rafael del Norte publicado en La Prensa. Sofía Sánchez la entrevista aquí sobre su visión de la ayuda para el desarrollo.
¿Cuál es tu opinión sobre la ayuda para el desarrollo?
Nicaragua vive en dependencia de la ayuda internacional desde 1980. De entonces a ahora el país ha recibido un apoyo económico significativo en forma de donaciones y préstamos, habiendo estos últimos generado grandes deudas. Nicaragua continúa siendo dependiente de esta ayuda exterior pese a todo lo que ha recibido. Si la ayuda finaliza la economía nacional se va a ver afectada significativamente.
El presupuesto para el año 2009 es de 32 ,5 billones de córdobas y de esa suma 3,7 billones están cubiertos por donaciones extranjeras y 5,2 billones por préstamos extranjeros. Hay un descubierto en el presupuesto de 1,3 billones dado que cesaron las donaciones en activos disponibles de los países europeos.
Este año el país no va a recibir los 64 millones de dólares americanos de los 175 millones que fueron aprobados para diferentes proyectos de desarrollo en la costa del este para la Cuenta Reto del Milenio.
Otro factor es que el dinero que, por medio de las familias que viven en EEUU, entraba al país ha disminuido a causa de la crisis económica internacional.
¿Crees que la ayuda internacional considera las necesidades de los nicaragüenses o refleja la imagen que tienen los países donadores de cuáles son las necesidades del país?
Depende de dónde sea que esa ayuda llega y a quien está dirigida. Nicaragua recibe diferente tipos de ayuda: Bilateral y multilateral, hay lugares amigos y apoyo solidario. Estos últimos se dirigen a menudo a la sociedad local.
La ayuda bilateral y la multilateral han tenido gran efecto social en lo que se refiere a proyectos de infraestructura, caminos, escuelas, centros de salud, así como también para combatir la pobreza. Pero la ayuda ha aumentado la deuda externa.
Puede también decirse que esta ayuda se ve captada por la burocracia. Dinero que debería haber sido utilizado para cubrir necesidades sociales ha acabado en los bolsillos de consultores nacionales e internacionales. Así sucedió con el proyecto Reducción de la Pobreza. El directos de este proyecto recibía 20 mil dólares americanos de sueldo mensual mientras la pobreza aumentaba en el país.
¿De qué manera la ayuda tiene efectos sobre la conducta de las organizaciones, las autoridades y la propia gente? ¿Ha significado un apoyo para los pobres o pensás que más que nada ha acabado en la administración? Ha creado la ayuda pasividad?
Creo que uno de los problemas mayores que ha habido es que el gobierno no ha tenido motivos para esforzarse en que el país fuese menos dependiente. Nos acostumbramos a vivir de la ayuda internacional, ni el gobierno ni los países donantes han tenido interés en invertir en la producción, ni en mejorar la exportación del país para hacer al país autárquico. Comemos pescado pero no aprendemos a pescar, como se suele decir.
Uno de los problemas más graves con la ayuda internacional ha sido la corrupción. Según mi opinión hubo mucha corrupción durante el gobierno de Arnoldo Alemán y, lamentablemente, ha seguido existiendo en los sucesivos gobiernos y sus autoridades, la corrupción ha existido hasta en las ONG.
No ha habido control sobre la repartición de los recursos y la administración de los fondos, eso es algo que hemos visto en todos los gobiernos. Caminos, hospitales y otras obras de infraestructura no se han hecho de calidad porque se ha utilizado malos materiales o contratado poco personal. Los responsables de los proyectos han retenido parte de los recursos.
Es lamentable, pero muchas veces la ayuda se ha utilizado mal, por ejemplo, después del huracán Mitch aumentó la ayuda externa pero gran parte de esos recursos acabaron donde los propios funcionarios del gobierno de Arnoldo Alemán. La ayuda se utilizó en pagar sueldos dobles a los empleados del estado y también sueldos elevados a los consultores nacionales e internacionales.
Los donantes establecen sus condiciones, definen qué es lo que están dispuestos a financiar y el gobierno y las ONG adaptan el proyecto a dichas condiciones. Sería bueno que los proyectos se formularan en torno a las necesidades de los destinatarios. En muchas ocasiones los donantes se ponen de acuerdo con los gobiernos y las ONG en que hay que asfaltar las calles. Pero si uno le pregunta a la gente sus prioridades son otras.
¿Notás alguna diferencia entre la ayuda bilateral y el apoyo de los movimientos solidarios? ¿Podés nombrar un ejemplo?
Para mí tanto la ayuda bilateral como el apoyo de los movimientos solidarios son importantes. No soy experta en el tema pero me parece que en la ayuda bilateral pesan más los intereses políticos del donante mientras que la ayuda de las organizaciones solidarias tiene carácter humanitario. Hay en ésta última mayor interés y contacto directo entre el donante y los destinatarios del proyecto.
En Nicaragua son muchos los ejemplos de proyectos llevados a cabo solidariamente. Podría, por ejemplo, nombrarte el proyecto El Fortín, un pueblo a 5 km de la ciudad de Granada. Aquí se construyeron 87 casas con apoyo de diferentes organizaciones de varias ciudades españolas. También levantaron otras 100 casas en la costa cerca del lago de Nicaragua. Ahora hay 100 familias pobres que tienen una vivienda.
¿Considerás que los países donantes han obligado a Nicaragua a cumplir condiciones para recibir la ayuda para los diferentes proyectos? ¿Podés citar algún ejemplo?
Siempre ha habido condiciones. Todos los países se ven obligados a cumplir las condiciones de los donantes para poder prestar dinero o recibir donaciones. Por ejemplo, para que Nicaragua pudiera estar entre los países de la Cuenta del Reto del Milenio el gobierno de EEUU puso tres condiciones: La competencia del gobierno, democracia y medidas económicas para desarrollar el país. Ahora EEUU ha retirado el apoyo por tres meses si el gobierno no hace algo en relación a las elecciones municipales que han sido muy criticadas. Algunas organizaciones han denunciado que ha habido fraude electoral en los 40 municipios. A esto se debió que varios países europeos retiraran 1,3 billones de apoyo a Nicaragua.
¿Cómo puede apoyarse a Eduardo Montealegre después del escándalo de corrupción con los fondos de CENI, dinero que podría haberse utilizado para combatir a la pobreza?
Soy periodista y no pertenezco a ningún partido político. En el 2006 recibí junto a otros periodistas la oferta de trabajar en las próximas elecciones. Aquí, al igual que en otros países, hay campañas sucias en las que los políticos sacan a relucir los trapos sucios de los otros candidatos y los atacan, eso fue lo que pasó con CENI.
La emisión de los Certificados Negociables de Inversion (CENI), los bonos de inversión comercial se hicieron cuando algunos bancos privados fueron a quiebra entre 2000 y 2001 con la intención de proteger los ahorros de miles de nicaragüenses que corrían el riesgo de perder sus ahorros. CENI fue creado en el 2001 por el BANIC, cuyo jefe entonces era Noel Ramírez, y por órdenes del presidente Arnoldo Alemán. En esos momentos no era Eduardo Montealegre funcionario estatal porque había terminado su cargo como canciller en octubre del 2000 y recién fue nombrado como Ministro de Hacienda en el 2002.
En el 2003 la dirección del banco, de la cual Eduardo Montealegre era miembro junto con otros funcionarios (por ejemplo Silvio Conrado, consejero del gobierno de entonces), autorizó a negociar los bonos emitidos. La negociación implicaba prolongar el período de pago y disminuir los intereses de 18.80 por ciento a 8.43. Esta disminución de los intereses daba una ganancia de 701 millones de dólares americanos. No había pérdida, según Montealegre.
Esta negociación era conocida y el parlamento de Nicaragua había aprobado los pagos al fondo del CENI en el presupuesto del gobierno. El gobierno en mandato entonces renegoció el CENI en noviembre de 2008 y disminuyó los intereses de 8.43 por ciento a 5.
El problema del CENI comenzó cuando las estafas conllevaron a la quiebra de los bancos lo que ocasionó deuda interna. De acuerdo a los estudios de los economistas hubo también corrupción durante el proceso de evaluación de la liquidez de los bancos lo que era responsabilidad de las direcciones respectivas, tal y como la inspección bancaria señalara. Montenegro nada tuvo que ver con ello, señala la periodista Rosario Montenegro.
Rosario, ¿podés contarnos sobre el libro anual de Cobertura Electoral que publicaste en septiembre del 2008?
El 11 de septiembre del 2008 presenté el libro que se compone de ocho capítulos en los que hago una revisión del proceso electoral de Nicaragua. Digo que es importante contar con observadores tanto nacionales como internacionales, asimismo, tener un concepto y etapas de una campaña electoral, nombre de candidatos a alcalde y vice alcalde, entre otros, información sobre las personas a las que se va a elegir, condiciones y atribuciones de los representantes municipales y marcos jurídicos. Proporciono datos sobre elecciones anteriores, entre otras una imagen comparativa de los diferentes partidos que ganaron las elecciones en 2000 y 2004.
El libro está dedicado a María José Bravo y Adolfo Olivas, dos periodistas asesinados mientras hacían su trabajo. María José fue asesinada dos días después de las elecciones municipales de noviembre del 2004 mientras informaba sobre el resultado electoral y cuestionaba el resultado de dos municipios en el departamento de Chontales. Adolfo Olivas, un muy buen periodista, fue asesinado en agosto del 2005 cuando escribía unos reportajes sobre el narcotráfico. Su pérdida me afecto mucho porque, además de ser dos colegas y amigos, yo era su jefe y sentí su desaparición como algo muy cercano.
El objetivo del libro es proporcionar herramientas a los periodistas nicaragüenses para que puedan realizar un mejor trabajo durante las elecciones. Por eso traté de recopilar información relevante sobre el proceso electoral. El libro tiene también la intención de recordar a los periodistas cuál es el objetivo de informar, dirigir y ser observadores, especialmente durante las campañas electorales porque ahí siempre hay intereses políticos. Los periodistas no solemos mantenernos fuera de los intereses políticos El libro es un ruego a los sectores políticos para que respeten el trabajo periodístico y nuestras vidas cuando estamos haciendo nuestro trabajo.
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