Cuba, Cuba
Mujer de La Habana Vieja
asofiasanchez@yahoo.se
Desde que era chica ha sido esta pequeña isla objeto de discusiones. Jag he escuchado que el socialismo es lo peor que existe y que Cuba es el ejemplo de país latinoamericano en el que no se respetan los derechos humanos. Yo nací en Nicaragua y mientras fui chica el país estaba dirigido por la mano de hierro de Somoza. Durante este período tenía Nicaragua un fuerte apoyo de EEUU y la mayoría hacía la vista gorda a los atropellos del dictador Somoza contra los derechos humanos. En Nicaragua se encarcelaba y torturaba a los jóvenes. A los ojos de muchos países era, sin embargo, Nicaragua un país democrático y muchos países, con EEUU a la cabeza, acrecentaron su comercio bajo el signo de la explotación. Poco se escribía acerca de la Nicaragua con más de 60 % de analfabetismo y adonde muchos niños morían de desnutrición. La mayor parte de la población no tenía derecho ni a la atención médica ni a la educación en esta dictadura que, desde mi punto de vista, no respetaba los derechos de los ciudadanos. La gente moría en los hospitales por la falta de medicina y las familias tenían que trabajar duro en los campos para poder dar de comer a sus hijos. Esta es la imagen que tengo de mi patria, Nicaragua, el país al que la prensa internacional describía como democrático y justo durante el gobierno de Somoza.
Estudiantes de Cuba
Un nuevo gobierno se formó el 19 de julio de 1979, el de los Sandinistas. Fueron criticados por EEUU y por otros países que no los apoyaron. EEUU impuso un bloqueo contra Nicaragua lo que implicó la prohibición de acuerdos comerciales directos entre Nicaragua y otros países. Comenzaron a escasear las medicinas y la situación económica en el país empeoró dramáticamente. El desarrollo se detuvo porque el gobierno en vez de poner en práctica programas tendientes a que la población elevara su nivel de vida, estaba obligado a defender el país de la agresión externa. Nicaragua no tuvo apoyo de EEUU porque se consideraba que el país no era democrático ya que recibía el apoyo de Cuba y de la Unión Soviética. EEUU apoyó en cambio a los soldados de Somoza quienes asesinaban a los campesinos nicaragüenses pobres. Esas fuerzas contrarrevolucionarias apoyadas por EEUU destruyeron muchos de los puestos sanitarios que Nicaragua acababa de construir. Cuba fue quien apoyó a Nicaragua enviando médicos a las zonas rurales. Muchos jóvenes nicaragüenses viajaron a Cuba para estudiar medicina, asimismo otras profesiones importantes y necesarias a la sociedad. Cuba ofreció esos estudios completamente subvencionados. El analfabetismo disminuyó a 12 % a comienzos de la década del 1980. De a poco, pero con firmeza, Nicaragua comenzó a levantarse, los derechos humanos se respetaban en el país, los jóvenes podían estudiar, las cifras de mortalidad infantil a causa de la escasez de medicinas disminuyeron y los nicaragüenses comenzaron a mirar esperanzados al futuro.
Está claro que la población de Nicaragua tenía peores condiciones de vida durante la dictadura de Somoza quecon el gobierno Sandinista . Lo mismo puede observarse en otros países que EEUU apoyó durante este período, como es el caso de Chile durante la dictadura de Pinochet.
La población nicaragüense recibió el apoyo masivo del gobierno cubano y ello condujo a muchas mejoras para la mayoría de los nicaragüenses. Cuba era el país que ofrecía educación gratuita para los ciudadanos. Cuba era el país que ofrecía, además de educación, atención sanitaria a niños y adultos, a diferencia de lo que Nicaragua ofrecía a sus ciudadanos durante la dictadura de Somoza. Cuba era el país en el que la gente era conciente de la importancia que la educación tiene para el individuo y en el que siempre existe un genuino interés por las cuestiones sociales, relativas tanto a Cuba como al resto del mundo.
Cansada de escuchar la propaganda anti castrista, tanto de EEUU como de otros países que sólo parecían querer resaltar lo negativo en lugar de los aportes de Cuba por ejemplo a Nicaragua, decidí visitar Cuba en 1994. Quería ver la realidad. Mi primera impresión fue que en Cuba no se nota la pobreza que se aprecia a primera vista en otros países de América central. No había niños que corrieran tras los turistas para mendigar. En este período sufría Cuba una crisis económica que la limitaba pero los cubanos lograron levantarse nuevamente. Muchos cubanos criticaban al gobierno aunque decían no querer tener una nueva ingerencia estadounidense sobre su economía y vida cotidiana. Muchos ancianos aún se acordaban de cuando Batista estaba en el poder. A los ricos no les faltaba nada mientras que los pobres eran sus sirvientes. En ese período, no había muchas diferencias entre Cuba y la Nicaragua de Somoza.
He regresado muchas veces a Cuba en años recientes. El contacto con los cubanos se me facilita porque el castellano es mi lengua materna. Además, si no hablo se me confunde con cubana por mi apariencia física. Y ello ha facilitado mi aprendizaje tanto de la cultura, la política como la mentalidad cubana. He viajado en camello, como cualquier otro cubano, he tenido trato con cubanos y así pude aprender sus usos y costumbres. No es fácil para un país pobre como Cuba tener que soportar la propaganda de EEUU y de los otros países anti cubanos, ni las amenazas del gobierno de EEUU y de los cubanos residentes en Miami de que tomarán el país. Mucho aprendí en estos viajes y admiro profundamente al pueblo cubano por su lucha por la libertad, por su empeño por sobrevivir en estos tiempos duros en que la pequeña isla está todo el tiempo en el centro de las discusiones.
Cuba ha sobrevivido tiempos duros. Los cubanos y los latinoamericanos deben estar orgullosos de que este pequeño país pueda seguir dando curso a su revolución con los pocos recursos de que disponen. Que no haya niños que mueran en la calle y que los adultos no pasen hambre son cuestiones fundamentales para todos aquellos que aman la justicia y el justo reparto de los recursos de la tierra.
Los cubanos fabrican sus propias herramientas para reparar sus máquinas. Los cosméticos con que se maquillan las mujeres provienen de fábricas cubanas. Utilizan ropa de fabricación nacional y no la que proviene de una zona libre. Sienten orgullo por su país. La lucha de los cubanos es una expresión de independencia y constituye la antítesis de la economía de mercado que actualmente, y en forma acelerada, se extiende sobre el mundo.
Me siento incómoda cuando leo lo que los medios masivos de comunicación publican sobre Cuba, ya que con una perspectiva más amplia se puede tener una mejor visión y una mejor comprensión de la sociedad cubana de la que los reporteros ofrecen al lector. Un texto que tome en cuenta la cuestión de una sociedad más humana y justa, desde el punto de vista de los más necesitados, refiere a los derechos ciudadanos. Es lamentable que, tanto en Suecia como en otros países, se caracterice al socialismo en forma tan negativa ya que éste no es más que humanismo en su expresión concreta. Si socialismo y solidaridad mueren nuestros mejores deseos para el bienestar de nuestros similares. No importa en que lugar de la tierra vos o yo vivimos. Todos somos seres humanos y debemos protegernos unos a otros y a la naturaleza para que las generaciones venideras puedan vivir en un mundo sin hambre, discordia o destrucción del medio ambiente.
Me decepcionan las críticas que leo sobre Cuba. No quiero distanciarme de los ideales del socialismo, pese a que hay ciertas cosas que puedan discutirse en relación a la política cubana. Admiro a los cubanos y me siento solidaria con ellos. Mucho me han dado mis viajes a Cuba y, por eso, no quiero olvidarme ni de la alegría ni de la solidaridad que encontré allá.
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